Muchos son los que desconocen las comunidades energéticas rurales, pero para los municipios rurales puede ser una de las mejores opciones para hacer sus territorios más sostenibles utilizando fuentes de energía renovable.
El cambio climático y sus desastrosas consecuencias afectan a todo el planeta, tanto a las zonas urbanas como a las rurales. Entre los retos que afronta la transición energética destaca la necesidad de reducir las emisiones de nuestras ciudades. Es necesario y urgente hacerlas más sostenibles.
Sin embargo, no podemos olvidarnos de nuestros municipios, que pueden beneficiarse enormemente de los modelos de sostenibilidad y neutralidad climática. En esto, las energías renovables juegan un papel básico, en especial la fotovoltaica. Y optar por las comunidades energéticas rurales es una excelente manera de hacerlo posible.
En las comunidades energéticas rurales todo son ventajas
Cambiar el modelo energético no es sólo cosa de técnicos o ingenieros. Es cosa de todos, empezando por las instituciones y la ciudadanía. En las comunidades energéticas rurales todo son ventajas. Por eso, cada vez son más los ayuntamientos que optan por crear una.
Gracias a ellas, los habitantes de muchos municipios pueden situarse en el centro de un mercado energético más democrático, sostenible y económico. Y los habitantes obtienen destacados beneficios económicos, sociales y medioambientales. Estos son los principales:
- Favorecen el medioambiente de la zona. Gracias al uso de una energía 100% limpia, el entorno se beneficia.
- Evitan la despoblación y atraen a nuevos habitantes. Especialmente importante en la llamada España vaciada.
- Reducen el coste de la energía. Esto se verá reflejado en la factura eléctrica tanto de los habitantes, a título individual, como de las empresas y los comercios locales.
- Desarrollan la economía. Fomentan el empleo y los negocios locales. Esto afecta tanto a los relacionados directamente con el sector de las renovables como a los que lo hacen indirectamente.
- Promueven nuevas inversiones. Toda la comunidad se beneficiará de ellas.
- Consiguen una mayor cohesión social. El hecho de crear una comunidad fortalece la unión en el municipio.
La transición energética es un modelo alternativo al tradicional. Apuesta por la producción, distribución y consumo de la energía de forma responsable y sostenible con el territorio. Este nuevo sistema, impulsado tanto por la Unión Europea como por el Gobierno de España, pasa por la sostenibilidad y el uso de fuentes de energía renovables.
Por un lado, el sol es una fuente de energía inagotable. Por otro, mantener paneles solares resulta sencillo. Son dos razones de peso para tomar la decisión de instalar paneles fotovoltaicos en las comunidades energéticas rurales.
¿Por qué es buena idea crear una comunidad energética rural en un municipio pequeño?
Cada uno de los habitantes de un municipio podría plantearse instalar paneles fotovoltaicos para consumo individual. Pero existe una opción mucho mejor: crear una instalación colectiva. Con una comunidad energética rural se aprovecha una misma instalación, comunitaria, de la que se beneficiarán todos los vecinos.
¿Pueden las comunidades energéticas rurales vender la energía que les sobra?
Efectivamente. Además de producir su propia energía, consumirla y almacenarla, pueden venderla. Este es el caso de las comunidades energéticas de autoconsumo. De esta forma, los beneficios económicos aumentan.
El medio rural es indispensable para conseguir una transición energética que pasa necesariamente por las energías renovables y por un mayor protagonismo ciudadano. Con las comunidades energéticas rurales salen ganando tanto los ciudadanos como la población y el territorio. Anímate a crear una para tu municipio. Te ayudaremos a hacerla realidad. Llámanos al +34 621 187 015, envíanos un correo electrónico a info@senda.green o rellena este sencillo formulario.
