En los últimos años, el precio que pagamos por la electricidad se ha incrementado, y mucho. Seguramente nunca antes se había hablado tanto del precio del kilovatio hora. Está presente en nuestras conversaciones cotidianas. Y es lógico, pues para mucha gente se ha convertido en una preocupación.

En este contexto se explica el auge que viven las comunidades energéticas. Tanto en poblaciones como en comunidades de vecinos, polígonos industriales, cooperativas… Basta con que un grupo de personas se pongan de acuerdo para crear una. Cada uno de sus miembros disfrutará de sus ventajas. Entre ellas, un ahorro considerable y la satisfacción de contribuir al bienestar del planeta. Por eso cada vez más gente se apunta al autoconsumo verde.

Un ahorro desde el primer día

¿Cuándo va a parar esta subida en el precio de la luz? ¿Tocará techo algún día? ¿Alguien va a encargarse de frenarlo? ¿Sabré en algún momento exactamente lo que voy a pagar por mi consumo de luz? ¿Por qué no entiendo lo que pone en mi factura?

Lamentablemente, no tenemos todas las respuestas a estas preguntas. Sin embargo, sí podemos asegurar que existe una alternativa al monopolio de las grandes compañías eléctricas. Está en las comunidades energéticas. Quienes las han probado, se muestran encantados con la experiencia.

Para empezar, han notado un descenso en la factura desde el primer día. Además, pagan únicamente por lo que consumen. Controlan en todo momento lo que gastan. Y gracias a eso saben lo que deberán abonar por ello. Eso les da una tranquilidad que realmente valoran. Pero también cuentan con otra ventaja económica más. Tienen la posibilidad de vender el excedente de energía que no utilizan, que les sobre. De ese modo, no se desperdicia nada.

Como decíamos, las ventajas económicas de las comunidades energéticas son uno de sus puntos a favor. Pero hay otros beneficios. Y son importantes. Vamos a recordarlos.

El medioambiente, otro gran beneficiado

Las comunidades energéticas utilizan energías renovables. La más habitual es la solar. No podía ser de otro modo en un país con tantas horas de sol como España. Las placas fotovoltaicas en tejados de viviendas particulares, edificios públicos o cubiertas de naves industriales forman ya parte de nuestro paisaje. Y sin duda las veremos cada vez más.

La solar es una energía 100% limpia. Con ella se evitan el empleo de combustibles fósiles y las emisiones nocivas a la atmósfera. Ello contribuye a cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) fijados por la ONU en la Agenda 2030.

La sostenibilidad y el compromiso con el planeta que habitamos es cosa de todos. Y todas las acciones para mejorarlo suman. Hemos de reducir, con urgencia, nuestra dependencia de los combustibles fósiles. Las comunidades energéticas solares nos ayudarán a conseguirlo.

Cuando los ciudadanos toman el poder

Las mejoras en la economía y en el medioambiente son indiscutibles. Pero las comunidades energéticas van más allá. Sitúan a los ciudadanos en el centro de la producción y control de la energía. Todos los miembros que las constituyen, sin excepción, participan en ellas. Y tienen poder de decisión en cualquiera de las acciones que se decida poner en práctica. Se trata de unas asociaciones voluntarias, libres y democráticas.

Cuanto más generemos nuestra propia energía, más independientes seremos de los precios que marca el mercado. ¿Por qué dejarlo todo en manos del Gobierno o de las comercializadoras? ¿Para qué esperar a que ellos actúen? Los ciudadanos, como consumidores, podemos actuar. Ahora tenemos el instrumento para hacerlo: la comunidad energética. Una figura jurídica al alcance de todos que puede beneficiarnos a todos. Es uno de los grandes elementos que están haciendo posible la necesaria transición energética

El autoconsumo verde frente al alza del precio de la luz pasa por las comunidades energéticas supone la fórmula más eficaz y eficiente para que cada uno de nosotros produzcamos nuestra propia energía. Si quieres informarte sobre cómo puedes formar parte de una, te ayudaremos. Llámanos al +34 621 187 015, envíanos un correo electrónico a info@senda.green o rellena este sencillo formulario.